Si se encuentra con un conductor que circula a gran velocidad, podría resultar gravemente herido en una colisión. Por desgracia, los accidentes que se producen a alta velocidad tienen más probabilidades de provocar lesiones graves e incluso la pérdida de la vida. Los conductores conducen con exceso de velocidad por diversas razones, pero no hay excusa para este comportamiento imprudente en la carretera.
Cada año, muchas personas sufren accidentes relacionados con la velocidad. Debería echar un vistazo a las estadísticas relativas al exceso de velocidad para comprender lo extendidos que están estos accidentes y reconocer también los factores de riesgo.
Según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carretera, más de 9.000 personas perdieron la vida por culpa de conductores que iban por encima del límite de velocidad durante 2019. El exceso de velocidad jugó un papel en 26% de todas las muertes de tráfico a lo largo de 2019. La NHTSA informa de que cuando los conductores conducen con exceso de velocidad y provocan un accidente, los implicados tienen más probabilidades de sufrir lesiones graves.
Desde la reducción de la eficacia de los equipos de protección hasta la pérdida del control del vehículo y las colisiones de gran impacto, el exceso de velocidad puede tener un desenlace devastador.
Los conductores aceleran por muchas razones. Algunos conducir demasiado rápido porque se sienten frustrados o enfadados debido a la rabia en la carretera o a la congestión del tráfico, mientras que otros aceleran porque no quieren faltar a una cita o necesitan llegar a tiempo al trabajo. A veces, los conductores jóvenes aceleran debido a la presión de sus compañeros o a la inexperiencia, mientras que otros conductores pueden sentirse anónimos o distantes mientras conducen.
Si usted o alguien de su familia sufrió lesiones en un accidente causada por un conductor con exceso de velocidad, defienda firmemente sus derechos.
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